lunes, 8 de abril de 2013

Los juzgados de la plaza del Pilar


 

Parece ser que el Gobierno de Aragón no tiene claro qué hacer con el espacio dejado por los juzgados de la plaza del Pilar. Son muchos metros y un lugar privilegiado como para no dejar perder una oportunidad de oro y poder hacer resurgir con fuerza el centro histórico de la ciudad. En diferentes informaciones de la prensa se hacen diferentes reflexiones que trasmiten la inquietud de cómo va a quedar este espacio emblemático de la ciudad en el momento en el que los juzgados dejen de estar allí. Es cierto que son muchas las personas que dejarán de acudir allí y también es cierto que muchos despachos de abogados y procuradores se trasladarán al nuevo recinto en la Expo. Las personas que acuden al Pilar no son suficientes como para mantener todas las infraestructuras que tiene este espacio. Es necesario reflexionar con profundidad y dar una respuesta adecuada en unos tiempos difíciles para la economía nacional y local. Hay propuestas de todo tipo: residencia de estudiantes, facultad universitaria, pisos, oficinas, hoteles… La verdad es que los tiempos que corren no son los adecuados para embarcarse en una aventura que conlleva bastantes millones de euros, y más todavía cuando no hay un mercado solido que dé respuesta a estas expectativas.

Bajo mi punto de vista una idea debe de ser la que sirva de guía para tomar una decisión adecuada y es que lo que se haga sea capaz de revitalizar todo ese espacio y ser motor de nuevas actividades económicas. La idea de hacer oficinas y pisos choca frontalmente con la realidad, la cual nos presenta un exceso de estos espacios desde hace varios años y aún más al salir los despachos de abogados a otros lugares. Lo mismo ocurre con los hoteles que desde la Expo se han saturado las plazas, con el agravante de que este tipo de hostelería no ofrece un motor activador del centro. El poner una Facultad Universitaria sí que sería interesante la propuesta dado que una actividad de este tipo lleva consigo una gran movilidad en las viviendas y otros espacios comerciales, es una actividad que da vida allí donde esté. También seria posible ubicar en parte de este espacio un anexo al Conservatorio Profesional de Música o una escuela de Idiomas. Por lo tanto el Gobierno de Aragón deberá considerar esta alternativa, aunque parece ser  que no hay dinero para poder meterse en este tipo de inversiones.

 Queda por considerar el reconvertir todo este espacio en un gran centro comercial y de ocio. La ciudad de Zaragoza especialmente ha seguido en las últimas décadas una trayectoria de apoyo a la instalación de superficies comerciales en el extrarradio de la ciudad, chocando frontalmente con la tradición mediterránea del comercio de proximidad. Esto ha provocado la desaparición del centro de la ciudad del comercio tradicional y el “vacio” de núcleos que anteriormente se encontraban llenos de vida. Creo que es de justicia que se le devuelva al centro de la ciudad aquello que es suyo y que pueda reconvertir este espacio ciudadano en un lugar de encuentro de todos los zaragozanos y visitantes sin necesidad de salir de la ciudad consolidada y por lo tanto evitando los problemas que ello conlleva, atascos, necesidad de trasportes, etc. Es un lugar perfecto por su localización, cercano al tranvía, con aparcamiento, apoyaría la actividad del Mercado Central y sería motor de todo el centro de la ciudad. Sería un lugar en el que la actividad estaría asegurada todos los días de la semana ya que los festivos ofrecería sus lugares de ocio y restauración. Se puede objetar que podría perjudicar a otras superficies comerciales, pero este problema no es de este lugar, ya que aquí si que estuvo desde siempre la actividad comercial que en las últimas décadas se llevaron al extrarradio.

No hay comentarios: